Se han escrito muchas historias sobre las pruebas de ADN. Yo trabajo con mujeres, así que estoy muy familiarizada con el tema. Hoy quiero compartir con ustedes una historia que me causó emociones encontradas.
Michael está convencido de que el bebé fue embarazado por su mujer. El bebé nació hace tres meses, y todo este tiempo el hombre ha estado dudando de la paternidad. Él mismo es rubio y de ojos azules. Y su mujer tiene los ojos azules y una larga melena pelirroja. Su hijo nació moreno y con ojos marrones.
Así que el hombre decidió que su mujer le había engañado. No sólo eso, sino que incluso sabe quién es el posible padre del bebé: el jefe de la mujer. Se parece mucho al bebé. Michael está seguro de que su mujer tiene una aventura aparte. Ha hecho las cuentas y asegura que el tiempo cuadra.
Algunos colegas también se han dado cuenta de que la mujer de Michael ha tenido una aventura con Ryan. Por eso el hombre se siente engañado. El niño está creciendo y se parece cada vez más al director de su mujer.
Michael le dice a su mujer que quiere una prueba de paternidad. Ella dice que es un insulto y amenaza con el divorcio. Ahora el rehén de la situación no sabe qué hacer. Os pide consejo a vosotros, los lectores. ¿Qué harías tú en su lugar?